El vicepresidente de la patronal del Baix Llobregat y de l’ Hospitalet hace un llamamiento a empresarios, autónomos y comerciantes a “no quedarse en casa o en el trabajo” y movilizarse por el #diguemprou
Sant Feliu de Llobregat (ACN).- Pimec ya cuenta con un millar de empresarios, autónomos y asociaciones de todo Catalunya adscritos al acto reivindicativo ‘Digamos basta’ que ha convocado para el 19 de marzo.
El acto tendrá lugar a partir de las seis tarde en el Palacio de Congresos de Barcelona y tiene que servir, según fuentes de la patronal, para consensuar un manifiesto con propuestas propias para la salida de la crisis que harán llegar a los gobiernos español y catalán.
La patronal continúa haciendo llamamientos a la movilización, también a empresarios y autónomos que no son socios de Pimec, para que “nadie se quede en casa o en el trabajo, que se añada a decir basta”, afirma el vicepresidente de la patronal del Baix Llobregat y l’ Hospitalet, Miquel Camps.
El comunicado #diguemprou de Pimec
Ahora hace ya más de siete años que estamos en crisis. Una crisis que ha afectado, y continúa afectando gravemente a nuestro tejido productivo. En especial y de forma más intensa a las pymes y a los autónomos, que han sido siempre la base de nuestra economía.
El 2007 Cataluña tenía 535.000 pymes que ocupaban a más de dos millones de personas. Hoy en día quedan 470.000 que ocupan alrededor de 1.650.000 trabajadores. Por lo tanto, por el largo y tortuoso camino de la crisis hemos perdido 65.000 empresas y más de 350.000 puestos de trabajo.
La crisis ha impactado también sobre la estructura económica catalana, agravando el fenómeno de la desindustrialización, perceptible ya desde finales de los noventa. La aportación de la industria al valor añadido catalán ha logrado un mínimo del 17%. Todo ello es un precio demasiado alto para nuestro país.
El año en que empezó la crisis, las pymes generaban el 64% del valor añadido de los sectores de mercado. A día de hoy, este parámetro se sitúa ligeramente por encima del 55%. La pérdida de peso frente a la gran empresa es evidente y también frente al sector público y los sectores de no mercado. Así, podemos afirmar que el segmento de la economía que más ha sufrido y está sufriendo la crisis es sin duda el de las pymes y los autónomos.
Pero curiosamente , tanto políticos como analistas parecen coincidir en que la salida de la crisis vendrá de la mano de las pymes y las nuevas empresas, que permitirán regenerar el tejido productivo del país. Todos se llenan la boca con este discurso. No obstante, las palabras van por un lado y los hechos van por otro. Se hacen promesas de apoyo que casi nunca llegan a buen puerto y justamente las últimas medidas van en dirección opuesta.
Hoy, no obstante, esta mayoría empresarial levanta su voz para exponer los numerosos agravios que sufre (los aumentos en los costes de la Seguridad Social, las políticas erráticas y los aumentos de los precios de la energía, la creciente presión fiscal, la carencia de crédito y su elevado coste, las continuas y reiteradas inspecciones de todo tipo, las trabas administrativas, etc) y reclamar cambios profundos e inmediatos. No podemos permitir que ser empresario haya acontecido una rareza o un milagro en nuestro país, que Catalnya haya dejado de ser una tierra de oportunidades y que nuestros jóvenes elijan antes el camino de la emigración que crear aquí su empresa. El futuro del país y de la sociedad están en peligro y ha llegado el momento de que las pymes y los autónomos #diguemprou