Entrevista a Lorenzo Silva, escriptor i guanyador del Premi Planeta 2012, veí de Viladecans
[dropcap color=”#336600″ font=”arial” fontsize=”40″]A[/dropcap] l’acte de presentació al Baix Llobregat de La marca del meridiano, obra guanyadora del Premi Planeta 2012, vam tenir l’oportunitat de parlar amb l’autor i preguntar-li la seva opinió sobre l’ofici d’escriptor i l’evolució del sector amb la revolució d’internet, l’impacte de la crisi econòmica en el sector cultural, així com sobre les relacions entre Catalunya i Espanya.
Què és per a tu el Baix Llobregat?
Para mí el Baix Llobregat ha sido un descubrimiento y casi una revelación insospechada porque a estas alturas de mi vida, y desde hace 4 años, es mi segunda casa. Yo soy de Madrid, he vivido prácticamente cuatro décadas allí y la verdad es que en sólo 4 años he encontrado aquí una casa en la que me siento casi tan a gusto como en mi casa de Madrid, que también hay que precisarlo se parece bastante al Baix Llobregat. Mi casa de Madrid no es la capital, mi casa de Madrid es la periferia sur de Madrid, así que estoy muy acostumbrado a este tipo de espacios. Y aquí hay una ventaja respecto a mi casa de Madrid: la gran ventaja es el mar.
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Quan vas saber que volies ser escriptor?
Lo supe bastante antes de ser abogado, de ir siquiera a una facultad de derecho. Yo supe que quería ser escritor con 14 o 15 años, con 16 seguro, y lo que ocurre es que a esa edad me dí cuenta que era muy difícil ganarse la vida con esto. De echo, pensé que nunca me ganaría la vida con esto. Por eso tuve que buscarme otros caminos profesionales a los que me dediqué durante bastantes años y que no me arrepiento. Porque la verdad es que también son caminos en los que he aprendido cosas que son muy útiles para un novelista.
Què t’ha portat a crear el teu propi segell editorial?
Antes que escritor, soy lector. Y como lector me gustaría que hubiera más libros de los que hay. Ya sé que hay muchos libros y hay quien piensa que hay demasiados títulos, pero yo tengo la sensación que hay libros que no tiene la oportunidad que creo que deberían tener. La atención, sobretodo ahora con la crisis y otros factores, se concentra mucho en unos pocos libros, no necesariamente los mejores, y hay otros que también son interesantes y que sin embargo creo que no están editados con el cariño que merecerían. Por ejemplo, hay mucha gente que ya no tiene otro camino que autoeditarse sus libros; esos libros acaban existiendo pero sin el respaldo de un editor.
Y es una ilusión que tenía desde hace tiempo: trabajar para que aparte de que existan mis libros, existan los libros de otras personas que merecen la pena.
Yo tengo editores, no necesito la editorial para mí, pero sí me parece que el oficio de editor es un bonito oficio, que hay quien ha intentado desvalorizar en los últimos tiempos y que creo que es importante reivindicar. Un buen escritor, un buen autor, un buen libro merece alguien que lo defienda y alguien que pelee por él y ese es el papel de un editor.
Com afecta internet a l’ofici d’escriptor?
El libro electrónico está ahí, internet como canal de distribución y como canal de encuentro entre lectores y escritores ya existe y está muy desarrollado. Y lo que hay que hacer es buscar el espacio ahí. Buscar un espacio que para mi no altera radicalmente el oficio del escritor, que sigue siendo encontrar una buena historia y contarla de la mejor manera posible, eso da igual hacerlo en un papel o en una pantalla. Para mi la esencia del oficio no se altera.
Lo que sí se altera es la manera de darlo a conocer y de hacerlo circular y ahí hay una serie de desafíos donde cada uno tiene que hacer su parte.
Yo creo que los lectores tienen que encontrar su nueva forma de buscar y tropezarse los libros que les interesan, las autoridades también tienen ahí un nuevo mercado que tendrán que regular. Porque igual que los mercados físicos están regulados y no podemos entrar en El Corte Inglés y llevarnos lo que nos da la gana porque nos da la gana, pues seguramente aquí también el gobierno tiene que hacer su papel. Pero vamos, yo no hablo como consumidor, ya que tengo un papel muy pequeño, ni tengo la capacidad de hacer leyes. Yo lo único que puede hacer es trabajar para que mi trabajo esté lo mejor posible, lo más rápido posible, lo más barato posible, lo más asequible posible y lo más accesible posible en internet y eso es lo que llevo haciendo desde hace muchos años, no desde hace dos o tres, yo estoy en internet desde hace trece años.
Com és la teva relació amb qui et llegeix?
A mí los lectores me dan muchísima información, que es muy valiosa para mí. Hay algún escritor, recuerdo que no hace mucho hubo unos declaraciones de Javier Marías que decía que un escritor no debía escuchar a los lectores y no debía relacionarse con los lectores porque eso te despistaba. Es legítimo, es un criterio que es el que él tiene, pero yo tengo un criterio diferente. Creo que quanta más información tengas, sobretodo si te dedicas a escribir novelas, más material tienes y más criterio tienes.
Al final, en eso sí estoy de acuerdo con él, un escritor debe hacer lo que quiere y lo que siente que debe hacer, con idependencia de que se lo valoren o no, con independencia de que la gente le diga que le gusta o que no le gusta, uno tiene que creer en su trabajo. Y si creer en tu trabajo es hacer cosas que a los demás no les gusta, pues tendrás que hacerlo, no vas a dejar de hacerlo porque alguien diga que está mal. Pero yo creo que tener toda esa información es muy útil para saber incluso mejor que es lo que tú quieres y que es lo que tu mismo puedes hacer.
Amb la crisi econòmica, s’està sacrificant la cultura?
Lo que voy a decir quizá no es muy políticamente correcto ni muy agradable de oír. Pero no nos engañemos, la cultura se alimenta de la educación y este es un país que tradicionalmente ha tenido una educación muy mejorable. Y seguimos teniendo una educación muy mejorable. Y un aprecio por la cultura muy mejorable, también. En otros países quizás sería más difícil sacrificar la cultura, porque la cultura en muchos otros países no sólo es parte de su identidad sino que también es parte de su PIB, que además tienen muy cuidada porque saben que la cultura también es riqueza. Aquí en España tenemos una conciencia muy débil de la riqueza que supone la cultura, porque lamentablemente, después de muchos años de atraso y de pobreza, no hemos llegado a alcanzar el nivel de educación que hace falta para que la gente aprecie la cultura y lo que vale.
La gente aprecia más otras cosas, que son menos valiosas que la cultura, quizá por eso es tan fácil para los gobiernos sacrificarla.
Com valores la relació Catalunya – Espanya?
Yo lo valoro como una partida de ajedrez. Y en esa partida de ajedrez hay blancas, que están a los dos lados y hay negras, que están a los dos lados. En los últimos tiempos mueven mucho las negras y parece que las blancas no tienen ideas. Yo creo que en una partida de ajedrez si los dos extremos del tablero mueven, la partida puede tener desenlaces diferentes. A mí me gustaría ver más piezas blancas moviéndose del lado de Catalunya y más piezas blancas moviéndose del lado del resto de Espanya. Si eso sucediera así, la partida no tiene por qué tener el final que mucha gente está anticipándole, tanto desde aquí como desde allí, que es un final traumático, un final de ruptura.
Está en nuestras manos, al final, lo que la gente piensa, lo que los pueblos quieren, lo que las naciones buscan depende mucho de lo que se les alimente y lo que se les inculque y de los discursos que construyan.
Si sólo construimos discursos de frustración, discursos de disensión, discursos de agravio, discursos de desprecio… entonces cosecharemos lo que hemos sembrado. Si sembramos otras cosas, podemos cosechar cosas muy diferentes. Porque realmente, la realidad tal y como yo la vivo (yo vivo aquí y vivo allí, no hablo de oídas de Madrid ni hablo de oídas de aquí) la realidad no es una realidad que por su esencia ni por sus sustancia nos aboque a una ruptura. Es una realidad que no es fácil de gestionar, como casi nunca suele ser la realidad, pero no estamos condenados a la ruptura. Si llegamos a esa ruptura será porque todos hemos sido muy torpes.
Com veus el futur?
Yo el futuro siempre lo veo mejor que el presente, porque tenemos algunas lecciones aprendidas y sobre esas lecciones podemos hacer cosas. El futuro está en parte en nuestras manos, hay cosas que escapan de nuestras manos, como un tsunami, pero no estamos en un país de tsunamis, podemos tener otros problemas pero en principio no nos van a afectar gravemente calamidades naturales. Así que en buena medida está en nuestras manos, está en lo que decidamos hacer con él.
Y tenemos margen de maniobra, naturalmente que lo tenemos. No hay por qué darse por muertos ni por perdidos, tenemos mucho margen de maniobra.
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